Miembro de AICE (Asociación de Intérpretes de Conferencia de España) desde 2001 y su Presidenta desde enero 2014, Ana Villa es licenciada en Filología Inglesa y Traductora intérprete Jurado por el Ministerio de Asuntos Exteriores. Fue profesora de inglés en el Instituto de Idiomas de la Universidad Complutense durante tres años, pero los trabajos con rutinas fijas no son lo suyo, por lo que cuando por casualidad descubrió el mundo de la interpretación se encontró como pez en el agua. Durante un año se formó en la técnica de la interpretación simultánea y consecutiva en cursos impartidos por intérpretes en ejercicio (Mario León e Isidoro Calín –a quien llamaban «la voz de La Clave»– para la simultánea y François Velazquez para la consecutiva).
Como Presidenta de AICE le quedan sólo cuatro meses de mandato y, aunque no ha parado durante este año y medio, todavía tiene muchos proyectos en el tintero que pasará a la siguiente Junta. Uno de los proyectos en los que ha invertido gran parte de su tiempo en los últimos meses es un vídeo titulado «Intérpretes» en el que varios miembros de AICE nos hablan de lo que significa esta profesión y de la asociación.
Vaya por delante mi agradecimiento a Ana por el tiempo que ha dedicado a esta entrevista y por querer compartir con nosotros su experiencia y la de AICE sobre el mundo de la interpretación:
1.- ¿Cómo fueron los inicios de AICE?
La Asociación de Intérpretes de Conferencia de España, AICE, se fundó en 1968. Surgió como respuesta a una necesidad del mercado, ya que a muchos clientes se les hacía muy cuesta arriba contratar a 4 intérpretes para una reunión en dos idiomas. Un grupo de intérpretes se unieron y empezaron a ofrecer traducción both ways, algo que hasta entonces era inusual y que de hecho sigue sin hacerse en las grandes instituciones internacionales que optan en cambio por lo que llamamos «cabinas puras».
2.- ¿Por qué una asociación sólo de intérpretes?
En primer lugar porque aunque ambas profesiones, la del intérprete y la del traductor escrito, tengan algunos aspectos en común, hay muchas diferencias. Además aunque muchos intérpretes hacen también traducciones escritas, hay una mayoría de intérpretes que sólo se dedican a la interpretación, por lo que tiene sentido una asociación de intérpretes únicamente.
3.- ¿Qué balance harías de estos años? ¿Qué ha cambiado en la profesión desde que se fundó AICE y qué cosas prevés que van a cambiar?
Realmente, si nos paramos a pensar cómo ha cambiado el mundo en estos 47 años la interpretación no ha sufrido tantos cambios como otras profesiones. El principal cambio en mi opinión procede de internet, lo que tiene dos efectos. Por un lado, antes los intérpretes llevábamos maletines llenos de diccionarios, mientras que en la actualidad pocos acudimos a trabajar sin un iPad o un ordenador portátil, y siempre con conexión a internet para consultar dudas, diccionarios y glosarios. En segundo lugar, y algo en mi opinión mucho más importante, ha sido la capacidad que gracias a internet tiene ahora el intérprete de prepararse sus conferencias en casa, buscando incluso videos del orador en youtube para familiarizarse con el tema y el acento, consultando artículos publicados sobre la materia, glosarios online etc. Esto da mayor calidad al trabajo del intérprete. En cuanto a cosas que preveo que van a cambiar, la más importante probablemente estará una vez más impulsada por internet y las nuevas tecnologías, la interpretación a distancia en sus diferentes variantes. No sabemos cómo va a evolucionar, y creo que necesitamos estar muy atentos a este cambio, para que sirva de agente facilitador y no empeore ni la calidad del resultado ni las condiciones de trabajo de los intérpretes.
4.- ¿Cuáles son los objetivos principales de la Asociación?
Fundamentalmente AICE se plantea como fines defender el ejercicio de la profesión de intérpretes de conferencia y representar y defender los intereses profesionales de sus asociados.
5.- ¿Cuál es el perfil del socio de AICE?
El socio de AICE debe ante todo ser ya un profesional de la interpretación de conferencia con experiencia comprobada. El perfil puede ser muy diferente, no tiene por qué ser necesariamente un licenciado en traducción e interpretación, aunque por supuesto esos estudios son muy valorados. Un perfil muy interesante puede ser el de un licenciado (graduado) en cualquier carrera (tenemos médicos, economistas, biólogos, licenciados en psicología, filología, magisterio etc.) que hayan cursado después un máster en interpretación. Hay muchos perfiles diferentes e igualmente válidos, lo fundamental es la experiencia.
6.- ¿Cómo se accede a AICE, cuál es el proceso de admisión?
La persona que desee formar parte de AICE debe ser en primer lugar intérprete de conferencia en ejercicio. En principio, deberá tener estudios universitarios y tener al menos dos idiomas activos, en A o en B+ (siendo el español/castellano uno de ellos) y preferiblemente al menos otro idioma pasivo, en C. En algunos casos excepcionales aceptamos a candidatos que no tienen titulación universitaria o 3 idiomas pero que presentan una combinación de lenguas especialmente interesante o tienen una experiencia muy amplia. El proceso de admisión está descrito en detalle en nuestra página web, pero en resumen el aspirante debe dirigir antes del 30 de junio de cada año una carta de solicitud de admisión al presidente de la Asociación y adjuntar el CV. Debe acreditar que cumple con los requisitos establecidos en nuestro Reglamento y pasar un periodo de prueba de dos años, durante los cuales será considerado Candidato. En este tiempo se le realizan evaluaciones por parte de cada uno de los miembros con los que coincide en cabina. Una vez transcurridos los dos años de prueba se somete su candidatura a votación y debe ser aceptado por mayoría absoluta en la Asamblea General de AICE. Sé que el proceso es duro y que puede «echar para atrás» a más de uno, pero os aseguro que merece la pena y es una buena forma de mantener AICE como marca de calidad.
7.- ¿Qué tipo de actividades de colaboración con otras asociaciones, difusión o formación organiza AICE?
En este momento nuestra actividad en ese sentido está centrada en la colaboración con la Red Vértice y con el comité de elaboración de normas AENOR. Nos hemos unido recientemente a ambas agrupaciones y tenemos mucha ilusión por ambos proyectos. Al margen de eso, hay varios miembros que además pertenecen por ejemplo a ASETRAD al ser también traductores escritos. Mantenemos contactos con algunas Asociaciones homólogas en otros países. En cuanto a la formación, en los últimos dos años hemos organizado varias actividades de formación y una conferencia impartida por profesores de la Universidad de Granada. Queremos tomar impulso y convertir la formación en algo prioritario para AICE. Tenemos planes a corto y medio plazo de varios cursos de formación (linkedIn, sistema jurídico español y su terminología, terminología médica, interpretación consecutiva), es todo un reto que posiblemente pasaremos a la siguiente junta pues mi mandato finaliza en sólo 5 meses.
8.- ¿Qué consejo daría AICE a los intérpretes que están empezando?
Que apunten siempre alto, que perfeccionen al máximo sus idiomas de trabajo, especialmente el inglés, sin el cual hoy en día es difícil tener trabajo como intérprete (ni siquiera de otra cabina). Que piensen siempre en el largo plazo, pensar sólo en trabajar mañana puede llevarte a aceptar trabajos para los que no estás cualificado o en condiciones que luego se vuelven contra ti.
9.- ¿Qué otros consejos les daría además Ana Villa, como intérprete que un día hace 26 años empezó en esta profesión?
Que sean profesionales serios y éticos, que preparen concienzudamente sus congresos, que vayan bien vestidos y sean discretos en su actitud, que se comporten como buenos compañeros, que dominen sus nervios, pues el nerviosismo se transmite a través del micrófono y el cliente nota la inseguridad y la valora muy negativamente.
10.- Por último, además de conocer el idioma o los idiomas de trabajo, ¿qué otras cualidades debe tener un buen intérprete?
Profesionalidad, rigor en la preparación de los temas que se tratarán y el correspondiente vocabulario, respeto de un estricto código ético. Ser buen comunicador, lo que incluye, pero no exclusivamente, una buena voz y una correcta entonación, que sea amena y sirva para comunicar, saber «actuar en el sentido más teatral de la palabra» (si es una reunión de ventas comunicar entusiasmo, si estás traduciendo algo duro y triste no puedes entonar como si pasaras de todo). Neutralidad, cultura general y muy variada, saber de muchos temas diferentes, discreción. En resumen, muchas deben ser las cualidades de un buen intérprete profesional, además del dominio de los idiomas de trabajo.